Sobre la productividad de la industria nacional frente al libre comercio
En la agenda actual de México predomina la discusión sobre temas tan diversos como el del aeropuerto, la transición política y la renegociación del tratado de libre comercio. Respecto al asunto de la transición política, existe gran debate y hasta temor en cuanto a los cambios importantes que se avecinan en materia de política económica, sobre todo si se compara con el modelo neo-liberal tradicional vigente, mientras que en relación con el TLCAN, hasta ahora se han revisado los puntos que merecen un cambio desde la óptica de cada de uno de los países miembros del tratado.
Respecto a este último punto, se debe tener en cuenta que el gobierno y la sociedad no han tomado atención a algo fundamental: antes de visualizar los puntos del tratado desde una perspectiva legal, es necesario hacer un diagnóstico de nuestro sector industrial para poder entender qué hacemos bien. Desde este enfoque, el presidente electo tendría argumentos suficientes para aplicar políticas que ayuden a mejorar el desempeño de la industria nacional, la cual enfrenta un problema estructural añejo: si no está encadenada a las cadenas valor extranjeras, no puede producir valor agregado. Esta área de oportunidad, sin duda, abre un espacio importante para la participación de la academia, que bien puede realizar estudios pertinentes sobre los rendimientos a escala existentes en la industria local con el propósito de detectar aquellos sectores que son altamente competitivos y así asesorar al gobierno para intervenir directamente en los casos donde hay expectativas de poder lograr retornos supranormales y ganancias constantes. Asimismo, estudios minuciosos de la combinación de factores de producción pueden coadyudar a una toma de decisión asertiva para nuestras autoridades.
De esta manera se pueden integrar elementos que explican nuestra ventaja competitiva y generar las políticas industriales adecuadas para tener esperanzas de una negociación más exitosa y no atender algo trascendental en una revisión más técnica. La economía es una ciencia sumamente rica que proporciona información crucial en negociaciones exitosas; por lo que sin un análisis económico profundo, las demás ciencias no tienen validez en el sentido de jurídico, administrativo y hasta cultural.
Es fundamental recordar que el cambio de paradigma económico resultó de una crisis no explicada por la demanda; si no por la oferta. Las políticas del nuevo modelo del presidente electo atienden necesidades para estimular la demanda, pero es importante no desatender la oferta y más en estos tiempos cruciales en la vida económica y política del país donde las personas tienen altas expectativas de un cambio estructural.
